
En Clínica Dental Vela Segalà, con sedes en Sant Celoni y Viladecans, atendemos con frecuencia a pacientes preocupados por la separación de sus dientes inferiores. Aunque algunas personas ven esta característica, denominada diastema, como un rasgo distintivo de su sonrisa, en otros casos puede deberse a problemas estructurales, funcionales o estéticos que afectan la salud bucodental.
Si notas que tus dientes de abajo presentan espacios entre ellos, es importante identificar la causa, conocer las posibles consecuencias y evaluar las opciones de tratamiento para corregir esta condición. Sigue leyendo este artículo.
¿Qué es un diastema inferior?
El término diastema hace referencia al espacio que se forma entre dos dientes. Es más común en la zona superior, entre los incisivos centrales, pero también puede presentarse en la arcada inferior.
Es importante diferenciarlo de los espacios causados por la pérdida de piezas dentales, ya que estos requieren un abordaje distinto. En muchos casos, el diastema en los dientes inferiores está relacionado con el tamaño de los dientes o la estructura ósea de la mandíbula.
Causas de la separación de dientes inferiores.
El diastema inferior puede aparecer a cualquier edad y responder a múltiples factores. Entre las causas más comunes, encontramos:
Dientes pequeños en proporción a la mandíbula
Cuando los dientes son más pequeños de lo normal, no ocupan todo el espacio de la mandíbula, lo que provoca la separación entre ellos. Este fenómeno puede deberse a la genética o a una condición denominada microdoncia, en la que algunos dientes tienen un tamaño desproporcionadamente pequeño en relación con el resto de la boca.
La microdoncia puede afectar a uno o varios dientes y, aunque generalmente es hereditaria, también puede estar relacionada con síndromes genéticos o con el desarrollo incompleto del esmalte dental. En estos casos, los diastemas pueden ser más pronunciados y requerir tratamientos específicos para armonizar la sonrisa.
Tamaño de la mandíbula mayor superior al de los dientes.
Cuando la mandíbula es demasiado grande en comparación con el tamaño de los dientes, estos tienden a separarse para ocupar el espacio disponible. Esta desproporción puede afectar tanto a la arcada superior como a la inferior y suele estar determinada por la genética.
En algunos casos, esta condición se manifiesta desde la infancia, pero en otros se hace más evidente con el paso de los años, especialmente si la estructura ósea sigue desarrollándose de manera desigual en relación con los dientes.
Frenillo labial inferior grande o mal posicionado
El frenillo labial es un tejido fibroso que conecta el labio con la encía. Si este tejido es demasiado grueso, corto o está mal posicionado, puede impedir que los incisivos inferiores se unan correctamente, manteniéndolos separados de manera permanente.
En estos casos, la solución más habitual es una frenectomía, un procedimiento sencillo que permite corregir la inserción del frenillo y favorecer la alineación dental, especialmente cuando se combina con un tratamiento de ortodoncia.
Malos hábitos orales en la infancia
Los hábitos adquiridos en la infancia pueden influir en la alineación dental y favorecer la aparición de diastemas. Chuparse el dedo o el uso prolongado del chupete ejerce presión sobre los incisivos inferiores, afectando su posición natural. Asimismo, la interposición lingual o el empuje constante de la lengua al tragar o hablar pueden desplazar los dientes con el tiempo. Otro factor es la respiración oral, ya que altera la posición de la lengua y puede modificar el desarrollo óseo, afectando la alineación de la dentadura.
Ausencia de una pieza dental.
La ausencia de un diente, ya sea por extracción o por pérdida natural, puede generar un desplazamiento progresivo de los dientes adyacentes en un intento de ocupar el espacio vacío.
Este fenómeno ocurre porque los dientes no están fijos en su posición de manera rígida, sino que se mantienen gracias a la presión y el contacto entre ellos. Cuando se pierde un diente, los dientes vecinos pueden inclinarse, rotar o separarse, provocando diastemas y desajustes en la mordida.
Presencia de un diente extra (mesiodens)
El mesiodens es un diente supernumerario, generalmente pequeño y de forma cónica, que aparece en la línea media de la arcada dental. Aunque es más frecuente en la parte superior, también puede manifestarse en la arcada inferior.
Su presencia puede interferir en el desarrollo de los dientes definitivos, provocando separaciones o erupciones irregulares. En estos casos, suele ser necesario extraer el diente supernumerario y evaluar si es necesario un tratamiento ortodóncico para cerrar los espacios generados.
Traumatismos o golpes en los dientes
Un impacto fuerte en los dientes, ya sea por un golpe accidental, una caída o un traumatismo deportivo, puede alterar su posición y provocar desplazamientos que generen separación entre ellos.
Dependiendo de la magnitud del golpe, los dientes pueden moverse ligeramente o, en casos más graves, sufrir fracturas o pérdida de soporte óseo, lo que aumenta la probabilidad de desarrollar diastemas. En estos casos, es fundamental acudir a un odontólogo para evaluar el daño y determinar el tratamiento adecuado.
Problemas que puede generar la separación de los dientes inferiores.
Generalmente, la presencia de diastemas o separación entre los dientes de abajo,no supone graves problemas bucodentales. Sin embargo, si la separación es muy pronunciada o se acompaña de otros síntomas, es recomendable acudir a nuestro equipo de odontólogos en Viladecans y Sant Celoni para evaluar su origen y determinar si puede derivar en complicaciones funcionales o estéticas.
Algunas de las consecuencias más comunes de los diastemas en los dientes inferiores incluyen:
- Dificultades en el habla: en pacientes jóvenes, una separación excesiva entre los dientes puede afectar la pronunciación de ciertos sonidos, dificultando el desarrollo del lenguaje.
- Desgaste del esmalte, encías y hueso maxilar: una mala distribución de las fuerzas al masticar puede ocasionar desgaste en el esmalte, retracción de encías y debilitamiento del hueso que soporta los dientes.
- Mayor riesgo de caries y enfermedades periodontales: los espacios interdentales pueden acumular restos de comida y placa bacteriana, favoreciendo la aparición de caries o infecciones en las encías como la gingivitis o la periodontitis.
- Problemas en la mordida y la articulación temporomandibular (ATM): un diastema significativo puede afectar la alineación dental y provocar maloclusiones, bruxismo o molestias en la articulación de la mandíbula.
- Impacto en la estética y autoestima: en algunos casos, la separación dental puede generar inseguridad en la sonrisa del paciente, afectando su confianza y bienestar emocional.
Tratamientos para solucionarla
En muchos casos, la separación entre los dientes inferiores se corrige de manera natural cuando erupcionan los dientes definitivos, ya que su tamaño es mayor y tienden a ocupar más espacio en la mandíbula. Sin embargo, cuando esta condición persiste en la edad adulta, es importante acudir a un especialista para evaluar la causa y definir el tratamiento más adecuado según cada caso.
En Clínica Dental Vela Segalà, ofrecemos diferentes soluciones para corregir el diastema inferior, dependiendo del origen del problema y las necesidades de cada paciente.
Ortodoncia
La ortodoncia es el tratamiento más efectivo y utilizado para cerrar espacios entre dientes y corregir su alineación. Existen diferentes tipos de ortodoncia, desde los brackets convencionales hasta alineadores invisibles como Invisalign, que ofrecen una alternativa estética y cómoda.
En casos donde el diastema está causado por una mala posición dental o un tamaño de mandíbula desproporcionado, este tratamiento es la mejor opción a largo plazo para lograr una sonrisa armónica y funcional.
Frenectomía
Si la separación dental es provocada por un frenillo labial inferior demasiado grande, se puede realizar una frenectomía. Esta es una intervención sencilla y mínimamente invasiva que se realiza con anestesia local para eliminar el tejido en exceso y permitir que los dientes se junten de manera natural.
Generalmente, la frenectomía se complementa con un tratamiento de ortodoncia para garantizar que los dientes mantengan su posición correcta tras la intervención.
Carillas dentales
Las carillas de composite o porcelana son una opción rápida y estética para cerrar pequeños diastemas sin necesidad de ortodoncia. Se trata de finas láminas que se adhieren a la superficie dental para modificar la forma, tamaño y color de los dientes, ofreciendo un resultado natural y armonioso.
Este tratamiento es ideal para pacientes que buscan una solución inmediata y no desean someterse a un tratamiento ortodóncico prolongado.
Coronas dentales
Cuando el diastema es consecuencia de la pérdida de una pieza dental o de dientes muy pequeños en relación con la mandíbula, las coronas pueden ser una excelente solución. En algunos casos, la colocación de implantes dentales puede ser necesaria para reemplazar la ausencia de dientes y lograr una mordida equilibrada.
¿Se puede prevenir la separación de los dientes inferiores?
Si bien en muchos casos el diastema tiene un origen genético y no se puede evitar, sí es posible prevenirlo cuando está relacionado con malos hábitos orales durante la infancia.
Para minimizar el riesgo de separación dental en el futuro, es fundamental:
- Controlar hábitos como la succión del dedo, el uso prolongado del chupete o el empuje lingual.
- Fomentar una correcta respiración nasal para evitar alteraciones en la posición de la lengua.
- Acudir a una revisión con el odontopediatra a partir del primer año de vida y con un ortodoncista alrededor de los seis años, para detectar posibles alteraciones en la alineación dental.
- Mantener una higiene bucal adecuada para prevenir enfermedades periodontales que puedan derivar en la pérdida de dientes y, en consecuencia, en la aparición de diastemas.
Confía en los especialistas de Clínica Dental Vela Segalà
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